Beta-glucanos de levaduras: una estrategia para estimular nuestro sistema inmune

Por un lado, existe la inmunidad innata o inespecífica, que agrupa a las barreras con las que se nace y que responden a todos los antígenos. Por el otro está la inmunidad adquirida, que se desarrolla frente a la exposición a diferentes antígenos a lo largo del tiempo.

Una respuesta inmunitaria eficiente protege contra muchas enfermedades y trastornos, mientras que una respuesta inmunitaria ineficiente permite que las patologías se desarrollen.

Estudios mostraron que los beta-glucanos naturales de levadura, reconocidos por la sigla WGP, son reconocidos por el sistema inmunológico innato, lo que les permite unirse a receptores específicos en las células inmunes. Es por ello que son empleados en productos para estimular las defensas de manera natural.

¿Qué son y cómo se procesan?
Los beta-glucanos son polisacáridos de elevado peso molecular que se encuentran en forma natural en la pared celular de diversos organismos vivos, entre ellos bacterias, pero también en alimentos como la levadura de panadería, los hongos shiitake y los granos de cereales, precisamente la cebada, la avena, el centeno y el trigo.

Por ser inocuos, muchas empresas los usan como agentes texturizantes, pero además estudios sugieren que, dependiendo de su estructura de origen, su consumo se asociaría a efectos beneficiosos para la salud. Por este motivo, los beta-glucanos son elegidos para la elaboración de alimentos funcionales.

A los beta-glucanos que provienen de cereales se les atribuyen propiedades beneficiosas de tipo metabólico, como la reducción de las concentraciones plasmáticas de colesterol y de glucosa.

Mientras que aquellos provenientes de levaduras, son asociados con propiedades inmunoestimulantes y se los emplea en productos para potenciar las defensas de forma activa.

Si bien la salud inmunitaria es importante para toda la población, quienes más se beneficiarían del consumo de productos a base de beta-glucanos de levadura son los adultos mayores, las personas que llevan un estilo de vida estresante, los deportistas y las familias con niños.

Evidencia científica
Según el estudio “ß-glucanos: ¿qué tipos existen y cuáles son sus beneficios en la salud?”, publicado en 2014 en la Revista Chilena de Nutrición, el efecto de los beta-glucanos de la levadura sobre las defensas “podría deberse a la capacidad de los ß-glucanos de estimular receptores del sistema inmune innato presentes en la membrana de los enterocitos, de las células M y de las células dendríticas, mejorando la actividad fagocítica de los macrófagos y la actividad antimicrobiana de las células mononucleares y de los neutrófilos”.

A la vez, la publicación agrega que el principal receptor implicado en el efecto de los ß-glucanos sobre la inmunidad seria la dectina-1, “miembro de los Receptores de Reconocimiento de Patrones (PRR) quienes cumplen un rol esencial en la respuesta inmune innata dirigida contra virus, bacterias, levaduras y hongos, contribuyendo al reconocimiento y eliminación de los patógenos”.

Uso en la industria y administración
La declaración de inocuidad de los beta-glucanos de levadura por parte de la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), permite que sean incluidos en una gran variedad de alimentos y bebidas en cerca de 60 países. A la vez, están disponibles en el mercado bajo distintas marcas.

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