Resolución de problemas de tableteo y herramental
La adopción de un proceso de siete pasos para el mantenimiento y el almacenamiento mejora la calidad del tableteado.
RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS Equipo y proceso
Trevor Higgins
La adopción de un proceso de siete pasos para el mantenimiento y el almacenamiento mejora la calidad del tableteado.
Los problemas en la manufactura de las tabletas y las fallas del herramental de las mismas son generalmente el resultado de uno o de una combinación de lo siguiente:
- Producto/gránulo difícil
- Diseño inapropiado de la tableta
- Preparación y operación incorrecta de la tableteadora
- Mantenimiento inadecuado de la tableteadora
- Pobre condición del herramental de las tabletas.
La pobre condición del herramental, en particular, puede causar muchos problemas. Sin embargo, estos problemas pueden minimizarse o eliminarse, adoptando un proceso simple, de siete pasos, de cuidado del herramental. El proceso de siete pasos es un esquema lógico, planeado y profesional para el mantenimiento y el almacenamiento del herramental que ha sido adoptado por muchas compañías alrededor del mundo como un procedimiento estándar de operación (PNO)
El proceso de siete pasos
1. Limpiar. Cuando el herramental se retira de la tableteadora, debe ser perfectamente limpiado y secado para eliminar cualquier aceite o residuo de producto, especialmente de áreas difíciles de alcanzar (p.ej., ranuras y relieves). El equipo utilizado para este proceso podría incluir limpieza ultrasónica y procesos de lavado automatizado. Es esencial, sin embargo, que el proceso no cause corrosión del material del herramental y para este fin, debe utilizarse un inhibidor de la corrosión.
2. Evaluar. Los punzones y las matrices deben ser inspeccionados visualmente bajo aumento en busca de señales de daño, desgaste o corrosión y validar el proceso de limpieza. Esta evaluación establecerá si el proceso de producción está corriendo bien o no. La evaluación también dará pistas para problemas con la tableteadora o el propio herramental e indicará si se requiere algún mantenimiento del herramental. El equipo típico incluye lentes de alto aumento y microscopios.
3. Reparar. El desgaste ligero de la superficie, la corrosión y el daño en el herramental pueden ser reparados y pulidos hasta una condición utilizable. Las puntas desgastadas pueden resultar en tabletas de pobre calidad e inferior definición del grabado, lo que puede llevar a laminado y pegoteado. Equipo tal como el mandril motorizado y el motor de pulido de doble extremo se usa junto con accesorios de pulido. La reparación debe llevarse a cabo por técnicos de mantenimiento bien entrenados y experimentados para asegurar que el herramental no se salga de los límites de tolerancia. La reparación no debe realizarse en herramental con recubrimiento ya que esto puede eliminar el recubrimiento del punzón.
4. Medir. La medición es esencial después de la reparación para asegurar que se han mantenido las dimensiones cruciales del herramental dentro de una tolerancia de trabajo aceptable. El equipo para medir puede ir desde simples micrómetros manuales, calibradores vernier, y medidores de altura hasta sistemas de medición semi-automáticos, computarizados, digitales. La medición debe llevarse a cabo a intervalos regulares, incluso si no ha sido necesaria la reparación, para verificar el desgaste natural durante el proceso de compactación. La medición esencial es la longitud de trabajo crítico del punzón, ya que éste controla el espesor, el peso y la dosis de la tableta.
5. Pulido. Un pulido ligero, controlado, de manera frecuente, asegurará que el herramental se mantenga con un terminado liso, ayudando a maximizar la vida del herramental y a reducir problemas tales como el pegoteo y el laminado. El pulido manual, para remediar, puede ser realizado utilizando motores de pulido con doble extremo con ruedas para pulir de nylon y compuestos abrasivos finos. Un proceso más controlado y consistente es el sistema de pulido por arrastre, automatizado, el cual se apoya menos en la habilidad y experiencia del operador. Este también permite que se pulan hasta 70 punzones en un ciclo de 20 minutos, proporcionando así aumento de la eficiencia. No se requiere volver a limpiar después del pulido siempre y cuando se use un medio y pasta para pulido de grado alimenticio durante esta operación.
6. Lubricar. La lubricación es importante para proteger el herramental y ayudar a que la operación sea suave. Puede recomendarse un rango de aceites y grasas para las diferentes aplicaciones.