Reporte desde: Brasil
Brasil ofrece oportunidades y retos para las compañías farmacéuticas globales.
REPORTE DE MERCADOS EMERGENTES
Hellen Berger
Brasil ofrece oportunidades y retos para las compañías farmacéuticas globales.
La demanda farmacéutica en Brasil continúa creciendo sostenidamente con cifras de ventas que se espera que alcancen $87,000 mdd en 2017 de acuerdo al IMS Health. Se anticipa que el país se convertirá en el cuarto mercado global más grande para farmacéuticos para 2016, encabezando la región de Latinoamérica.
Brasil ha recorrido un largo camino desde su época de alta inflación, logrando una deuda nacional baja, con una clase media que crece rápidamente y que está hambrienta de casi cualquier cosa que el dinero pueda comprar, incluyendo electrónicos de primera categoría, automóviles importados, vacaciones internacionales y cursos en MBA. Adicionalmente, el acceso a la salud privada, una expansión del mercado de fármacos genéricos a través de políticas del gobierno, así como el incremento de servicios de salud nacionales junto con mejores regulaciones en los negocios han atraído las miradas de las compañías farmacéuticas internacionales.
“Brasil, comparado con sus contrapartes emergentes, presenta una importante ventaja [para las compañías internacionales] porque somos un país democrático con conocimiento en el campo legal, tenemos instituciones que trabajan apropiadamente así como [los beneficios de] la prensa libre y recursos judiciales,” dice Antonio Britto, presidente ejecutivo de Interfarma (una asociación de industrias de investigación farmacéutica) con base en Sao Paulo. Britto añade que su entorno presenta el principal diferencial de Brasil, seguido por el hecho de que los mercados emergentes han estado expandiéndose principalmente en productos farmacéuticos comunes o populares en medio del aumento en el poder de compra en estas regiones.